Me siento un poco extraña con esto de publicar un blog. Por un lado me gusta el desafío de explorar un territorio desconocido como son las nuevas tecnologías, aunque llevo años manejando esto de internet a nivel usuario, y por otro lado siento cierta vergüenza por publicar pensamientos o sentimientos que quizás lean otras personas. Es cierto que aquí, en la red, podemos escudarnos en el anonimato, podemos inventarnos identidades o falsearlas, pero a mí no me va mucho ese rollo, ya bastante tenemos con las limitaciones en las relaciones sociales cotidianas, en guardar las formas para no ofender o para que no nos dañen como para también inventarme un personaje o un alter-ego en internet.
Mi intención con el blog no es otra que hacer comentarios sobre las cosas que me gustan o que no me gustan de la vida, sobre los libros que leo, sobre las películas que veo o sobre las noticias de la prensa que más me llamen la atención. En principio no quiero que se convierta ni en un diario (¡menudo corte si me lee alguien extraño!), ni en una página sobre pensamientos intelectuales y sesudos. Tal vez si aprendo a manejar esto con soltura pueda traer enlaces a páginas o a fotos y videos que me parezcan interesantes.
Espero no cansarme pronto de la página y tener todos los días un ratito para trabajar en ella. Con esos buenos deseos dejo por hoy, mi primer día de blog, de darle a la tecla.
